29 mayo 2007

TERAPIAS ALTERNATIVAS

TÉCNICA QUE TAMBIÉN SOLUCIONA LA DEPRESIÓN Y EL ESTRÉS
Afirman que con
el Reiki
se podría
frenar el cáncer

En primer lugar, sus cultores sostienen que siempre va de la mano del tratamiento médico adecuado para que cada afección. El método es de origen japonés.

Desde hace dos décadas se conoce en casi todo el mundo la palabra Reiki, un sistema de transmisión y armonización energética y que identifica a su vez un sistema de sanación natural, es decir que logra un equilibrio o armonía entre los planos físico, emocional, mental y espiritual.
Sirve para todo: alivia desde problemas estomacales, enfermedades agudas, pre y post operatorios, depresión, estrés, insomnio, hasta enfermedades crónicas y terminales.
Aunque, siempre hay que tener en cuenta que este método no ocupa el lugar del médico o especialista, sólo intenta complementarlo.
Las personas habilitadas para dar Reiki aseguran que este procedimiento “aporta energía vital, produce relajación profunda y promueve la búsqueda de claridad y conexión interior”.
El método pude aplicarse a todo lo que tiene vida, por ejemplo a animales y plantas. La palabra japonesa Reiki significa Energía de Vida Universal.
Rei representa la energía que generó la vida, la que sostiene, que es la energía universal trascendente y ki es la energía individual.
El tratamiento lo hace sólo una persona iniciada en el ejercicio. Hay que dejar claro que cualquiera lo puede recibir, pero para administrarlo se debe, previamente, estar preparado por un maestro.

El empleo

La persona que lo aplica, apoya sus manos sobre el cuerpo en 12 posiciones básicas, que están orientadas a los órganos vitales más importantes, por lo tanto hacia los centros energéticos principales. Hay 4 posiciones en la cabeza, 4 en el frente del cuerpo y 4 de espalda.
Se comienza por un tratamiento de cuatro días consecutivos, de una hora aproximadamente, que de acuerdo a las necesidades del caso se determinará si es suficiente o si es conveniente seguir con las sesiones.
En cuanto al ambiente de la sesión, quienes lo aplican sostienen que la persona que va a recibir el tratamiento tiene que estar cómodo, en un lugar agradable, calefaccionado o ventilado, según la estación del año y si la persona lo desea pude escuchar música.
Sin embargo, no tiene nada que ver con lo que se logra, porque se puede dar y recibir el Reiki en medio de una guerra.
Una maestra que pertenece a The Reiki Alliance (es una asociación de maestros, con sede en Estados Unidos), afirmó que cuando usa este método “puede sentir diversas sensaciones o quizás nada”.
Pero al mismo tiempo dejó en claro que las sensaciones “no tienen nada que ver con que se transmita o no la energía”.
Las reacciones que tienen las personas que reciben el tratamiento pueden ser múltiples: el 90 por ciento se duerme -quizás no en la primera sesión, ya que quieren ver de qué se trata- otros irrumpen en llanto y otros se ríen o cantan.
Los iniciados explican que “pasa lo que esa persona necesite en ese momento; por ejemplo, algunos sienten ganas de hacer un montón de cosas que antes no podían o no querían”.

A lo lejos

Por otra parte, existe el “Reiki a distancia”, donde la persona capacitada, ya en un segundo nivel, envía energía a alguien determinado, que puede estar haciendo cualquier cosa, pero probablemente se de cuenta que le están haciendo la energía.
Por otra parte, un conocido terapeuta holístico, subrayó que quien aplica este tratamiento no es una persona que tiene energía especial, sino que “se convierte en un canal, que es una especie de cañería que se acondiciona para poder recibir esa energía y transmitirla. Por eso a la hora de elegir el reikista hay que hacerlo por recomendaciones de conocidos”.
La conocida psicóloga Regina Strenger, se acercó al método por necesidad, dada la angustia por la que estaba atravesando. En recientes declaraciones a la prensa dijo que “me inició una maestra, me hice autotratamiento, llegué a la causa de problema y logre mi armonización. Como terapeuta complemento el tratamiento psicológico con Reiki, ya que es un método que permite que afloren los conflictos en forma más rápida con la consiguiente metabolización de los mismos”
En fuentes especializadas se sostiene que a una persona a la que le aplicó la técnica se curó completamente de un cáncer.
Otro de los casos que se enumeran es el de una mujer que padecía de un tumor, que estaba internada, sin conocimiento, pero se le dio Reiki en el hospital durante cuatro días y al tercero ya se había despertado. Lógicamente, ambas recibían tratamiento médico.
Los que dan Reiki aseguran que es muy difícil determinar cuándo una persona está curada definitivamente porque se “pueden lograr alivios momentáneos o curaciones que se sostengan a lo largo del tiempo”. Todo dependerá del proceso de vida de cada individuo.
De cualquier manera, cuando se trata de padecimientos crónicos (o terminales) este tipo de terapia siempre acompaña al tratamiento médico correspondiente, y cuando el problema es menor, también es conveniente hacer una consulta con un profesional adecuado para el caso.

28 mayo 2007

Sepa cómo vencer las distonías

Desconocida aún por muchos de quienes la padecen, la distonía es un cuadro neurológico que afecta a los músculos y que en la Argentina -por ejemplo- afecta aproximadamente a 40.000 argentinos, de acuerdo con la experiencia médica.
Las distonías abarcan a aquellas enfermedades neurológicas caracterizadas por la contracción involuntaria y sostenida de uno o varios grupos musculares: “A menudo, origina posturas anormales y/o movimientos de torsión de una o más partes del cuerpo, que alteran la vida de la persona y, si el cuadro es severo pueden ocasionar discapacidad”, comentó la doctora Nélida Garretto, jefa del Área de Trastornos del Movimiento de la División Neurología del Hospital J. M. Ramos Mejía, de Buenos Aires.
Hombres y mujeres, de cualquier edad, pueden sufrir distonías. Las regiones del cuerpo más afectadas son la cabeza, la cara, el tronco, los brazos y/o las piernas.
Las contracciones musculares pueden ser leves o más severas, dificultando o impidiendo realizar movimientos voluntarios como caminar, hablar, comer, causando a veces episodios de mucho dolor.

Poder detectarlas


Dado que las manifestaciones pueden ser en ocasiones confundidas o subestimadas, es probable que una parte de la población padezca distonía sin saberlo y por ende sin recibir el tratamiento adecuado. En muchos casos, un blefaroespasmo (contracción sostenida de los músculos de los párpados) se confunde con un problema oftalmológico, cuando en realidad es neurológico.
“La experiencia diaria en el consultorio médico muestra fuertes indicios de que la población de pacientes con distonía es mucho mayor que lo que se sospecha, que en ocasiones no se diagnostica como tal y que esto lleva a demoras en recibir un tratamiento adecuado”, dijo la especialista argentina.
Si la distonía comienza en la infancia es frecuente que se extienda a distintos grupos musculares. Por eso resulta clave el diagnóstico y tratamiento precoz de esta afección, lo que evitara las complicaciones ocasionadas por la presencia sostenida de posturas anormales.

Diagnóstico y tratamiento


El diagnóstico de la distonía es clínico, ya que estas posturas y movimientos involuntarios son detectados al examinar al paciente.
Por otra parte, el médico indagará minuciosamente el árbol familiar, buscando antecedentes de distonía en sus distintas modalidades: focal, segmentaria, generalizada. Hasta el más pequeño caso de tortícolis será tenido en cuenta.
Esta información será crucial para decidir realizar una prueba genética, un procedimiento que es posible en algunos casos. Una vez identificado el tipo de distonía, el neurólogo en base a su experiencia podrá indicar la mejor terapia según cada caso.

¿El uso de botox?

Si la distonía es focal y afecta a un grupo limitado de músculos, la aplicación de botox ha demostrado ser la primera opción de tratamiento seguro y efectivo.
“Debe ser aplicado por profesionales entrenados en su uso y debe ser repetido aproximadamente cada tres o cuatro meses al año”, enfatizó la doctora Garretto.
Es un producto biológico, es decir, un original con características propias no intercambiables con otras preparaciones. Su eficacia reside en que actúa inhibiendo la liberación del neurotransmisor acetilcolina en las terminaciones nerviosas -que normalmente estimulan la contracción de los músculos- produciendo la disminución de la fuerza del músculo inyectado: “Generalmente, los beneficios del tratamiento comienzan a tener efecto dentro de los cinco a diez días después de la aplicación y se prolongan durante tres a seis meses, al cabo de los cuales el paciente debe ser reinfiltrado”, explicó la neuróloga.
Las inyecciones se aplican directamente sobre los músculos afectados y la dosis y cantidad de puntos de aplicación varían según el volumen y la fuerza de contracción del/los músculo/s comprometido/s.
Los resultados demuestran que la toxina mejora la calidad de vida del paciente porque disminuye la frecuencia e intensidad del dolor, mejora la incapacidad funcional, facilita el tratamiento ambulatorio y reduce los riesgos de la cirugía.

Medicamentos orales

El tratamiento de las distonías por medio de medicamentos orales es efectivo sólo para algunos pacientes. Determinadas drogas se utilizan para interferir en la comunicación de los neurotransmisores, que son sustancias químicas que permiten la circulación de mensajes dentro del cerebro.
En distonías focales la medicación oral no es considerada el tratamiento de primera elección ya que estos fármacos son poco efectivos y presentan diversos efectos adversos frecuentes (como por ejemplo visión borrosa, boca seca, síndrome confusional, retención urinaria, debilidad muscular, incoordinación).

Cirugía

La cirugía es una opción para pacientes que no responden a otras terapias. Los tratamientos quirúrgicos incluyen la denervación selectiva para la distonía cervical, y la palidotomía, o la estimulación cerebral profunda para formas más severas de distonía.
Estas últimas brindan resultados espectaculares aun en casos muy severos de distonía generalizadas.

¿Hay otros modos?

El tratamiento médico es la clave de la mejora de este tipo de pacientes, pero es importante no dejar de lado una actitud positiva frente a ellos. La distonía es una condición que en general no presenta riesgos de vida, pero dependiendo de su severidad afecta la calidad de vida del paciente interfiriendo en su vida laboral social y familiar.
La doctora Nélida Garretto aclaró que frente a una enfermedad de este tipo es de suma importancia brindar al paciente toda la información necesaria que le permita conocer su patología y todas las alternativas de tratamiento disponibles que contribuirán a mantener una adecuada calidad de vida.


Para mayor información:
Florencia Yanuzzio / Carla Perego
Email:
florencia_yanuzzio@ar.bm.com / carla_perego@ar.bm.com